El pasado domingo volvió a visitarnos mi querida princesita Iria. No sabéis el cariño que le tengo a esta encantadora familia que además de majísimos son puro amor. Me han dejado ser cómplice del primer añito de Iria pudiendo retratarla cada varios meses hasta hoy, el día de su sesión de cumpleaños. Imaginad que ilusión! y que momento tan especial.
Gracias papis por confiar siempre en mi para inmortalizar estos momentos únicos.
Nos lo pasamos bomba en la sesión pero eso del pastel... mmmhh.... como que no le hizo mucha gracia a la peque. Odiaba ensuciarse las manitas con el merengue y eso del sabor dulce tampoco le llamaba la atención. Ella quería sus ganchitos! y con sus ganchitos se quedó.
Adoro a esta pequeña princesita porque con tan solo un añito recién cumplido derrocha una personalidad abrumadora.
Al final le medio camuflamos los ganchitos en la tarta (porque sino no quería ni verla!) e hicimos una sesión Smash Cake de lo más original y divertida, sí señor!
Y ya sabéis, si vuestro peque, sobrino, etc... cumple añitos en breve no hay nada más original y especial que una sesión de cumpleaños. Un regalo único para guardar toda la vida :)
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